sábado

ETAPA 8 : SALAMANCA - ZAMORA

Viernes, 6 de Agosto de 2010


Suena el móvil y me levanto para preparar todo, esta vez no hemos oído ruidos de bolsas ni cremalleras y es que estábamos en una pequeña habitación para los dos solos, después bajamos al aseo y al desayuno.




Monté las alforjas en las bicis y mientras tanto María hablaba con Isabel la hospitalera.




Después de ultimar todos los detalles la foto de despedida y para el recuerdo…Gracias por todo Isabel.




María saliendo por el callejón del albergue.




Bordeamos la catedral y entramos por este callejón.




Al final había unas escaleras pero después de todos los obstáculos que habíamos pasado desde que salimos de Sevilla, esto no es nada.




Subimos las bicis y continuamos por la calle paralelos a la Catedral.




Aquí estoy en las puertas de la Catedral.




María en la calle peatonal, al fondo la Catedral.




Llegamos a la casa de las Conchas y llamé con el golpeador, no abrió nadie pero desde dentro me dijeron que faltaban 10 minutos para que abrieran.




Sacamos el portátil para poner el comienzo del directo y así hicimos tiempo para que abrieran.




Aquí vemos a María en las escaleras de la iglesia la Clececia, que está justo enfrente poniendo el directo.




Por fin abrieron y pasamos, en su interior un patio con columnas y un pozo en el centro.




Patio interior de la Casa de las Conchas, al fondo las torres de la iglesia la Clerecia.



Figuras en la parte alta del patio.



El interior de la casa de las conchas es la biblioteca donde María aprovechó para colgar mejor la crónica y yo al tener wifi subí las fotos más deprisa en el portátil.




Salimos de la Casa de las Conchas y nos fuimos a la plaza para hacernos fotos para el recuerdo pero nuestro gozo en un pozo, la plaza está tomada por furgonetas.




Tan solo unos metros cerca del Ayuntamiento se libran de furgonetas.




Aquí vemos a María.




María en la plaza en la salida para la calle Zamora.




María en el arco de salida en la plaza.




Calle Zamora.




Larga calle que nos conduce a la carretera de Zamora.




María pasando junto a la iglesia de San Marcos.




Por fin dejamos la ciudad de Salamanca.




Pasamos junto a este avión que esta a escasos metros del camino.




Al final del andadero se llega a esta rotonda perfectamente indicada.




Entramos en ALDEASECA por la acera.




Más adelante nos salimos al arcén pues la acera tenía agujeros y adoquines levantados.




Pasamos este pueblo si parar




Largas rectas, al fondo María alejándose




Lagunas típicas de Zamora




Entramos en la provincia de Zamora.




La general se deja y cogemos la carretera del Cubo y el Vino




Nos acercamos al siguiente pueblo.




Estamos en CUBO DEL VINO.




Indicador del albergue en la calle principal




Disco de visión en el cruce. En este pueblo paramos a comer un bocata y nos juntamos todos, los bocatas fueron de lomo con mahonesa y estaban muy buenos, después decidimos continuar.



Cruceiro a la salida del pueblo. Junto a la Iglesia en la pared está la piedra al peregrino.




Antes de cruzar el puente vimos este parque que está al lado derecho con barbacoas y fuentes, como veis ideal para descansar.




El siguiente tramo lo hicimos por el arcén, aquí estamos entrando en CORRALES DEL VINO.




Pasamos este pueblo y seguimos por el arcén unos km más.




Como ya lo habíamos hablado en Salamanca comeríamos en las famosas cuevas de EL PERDIGÓN. Aquí estoy en la Iglesia del pueblo… detrás están las cuevas.




José y Silvestre bajando una cueva, fijaros en la soga para bajar y subir.




Pozo en el interior de la cueva de aguas puras y transparentes.




La comida en la cueva estuvo normal pero el precio fue excesivo, demasiado caro para lo que fue la comida, se pasó bastante por lo que recomiendo no pasar a esta cueva Los Yuncos.




Interior de la cueva, al final antes de irnos el dueño me regaló un jarrón de barro típico de Zamora y yo se lo di a los compis.




Salimos de el Perdigón y cogimos el camino de enlace, a dos kilómetros ya estábamos en el camino, este es el mojón indicador.




María acercándose, al fondo el pueblo de las cuevas.




Bifurcación de caminos con este miliario grabado y además con el bordón y la calabaza.




Aquí estoy, detrás de mí el pueblo de la Estrala.




María avanzando por este camino.




Hace mucho calor y un fuerte sol, pero María con la alergia al sol tiene que ir de largo y además empujando en estos arenales




A mí también me paso lo mismo y con tanto peso más.




Daban miedo tantos pinchos en el camino y fue una lotería no pinchar.




Miliario en medio de la nada.




María quitándose los pinchos del pantalón, a mí fue peor… en el calcetín derecho.




Seguimos un nuevo camino.




Llegamos a este curioso lugar donde se juntan los tres caminos. En el centro está el brocal de las promesas.




Esta es una de las piedras.




Esta es otra de las piedras.




Esta ultima indica un poco dónde estamos y la unión de los caminos.




María echando las piedras en el pozo de las promesas, este está en 5 idiomas.




Dejamos este bonito lugar y seguimos por el camino, como podéis ver la flecha está en los lugares más inesperados.




En el tramo que acabamos de pasar tened cuidado pues salen muchos caminos, estar atentos a las escondidas flechas.



Subiréis unas cuestas por caminos paralelas a unos chalets y con algunas alambradas con perros, después llegareis al alto desde donde veréis lo que se ve en la foto.



Esta calle hormigonada nos dejara en la carretera de Bermillo de Sayago, aquí encontrareis un cruce con cuatro calles, cogeréis la que apunta frente a la Catedral es la que hace cuesta abajo.




Por la carretera pasaremos por el centro del barrio de San Frontis, barrio donde nació mi padre.




En esta foto podéis ver cómo nos acercamos a la Catedral pero al final la carretera se aleja paralela al rio en busca del puente de piedra.




Aquí estamos cada vez más cerca del puente.




Por fin aquí estamos pasando el puente de piedra, estamos en ZAMORA.

Nada más cruzar el puente subimos por la cuesta San Cipriano y llegamos al albergue, los hospitaleros nos dieron cama y lo de siempre hacer las camas las duchas, la colada etc...


Con todo listo nos fuimos dando un paseo hasta los bares típicos pero estaban cerrados por lo que desde allí nos acercamos a la Valenciana a comer unos helados, que nos comimos en el parque de enfrente.


De vuelta para el albergue paramos a comprar otros y Silvestre nos quiso invitar pero el dueño que me conocía dijo que nos invitaba él. Desde aquí te doy las gracias por la invitación y por esos helados tan ricos que haces.


El paseo hasta el albergue estuvo bien, aunque para mí que soy de Zamora era algo especial, lastima de no tener fotos pues se me termino la batería, de todas formas en el blog camino sanabrés en bici por Rossi podéis encontrar una información más detallada.

2 comentarios:

  1. Hola María y Rossi es la primera vez que os dejo un mensaje… aunque veo todos vuestros viajes, en esta etapa habéis dado a conocer este lugar tan especial “el brocal de las promesas “ del que nunca había oído hablar a nadie.
    No sé si te lo han dicho antes pero el blog es una maravilla, con todo bien explicado y un reportaje fotográfico…mejor que en mi boda.
    Gracias a los dos sois los mejores.
    Raquel

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  2. Hola pareja acabo de ver el comentario que ha dejado Raquel y pienso lo mismo que ella, porque nadie habla de este lugar parece cuanto menos extraño.
    Me ha gustado la etapa y lo de comer en las cuevas, no todo va a ser pedalear je je je
    Estoy al loro compañeros
    José

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